En la búsqueda del tema, pensé en lo que mueve más la zona y es el comercio esotérico, entonces a pesar de que puedes hacer mil enfoques tenía que comenzar con las delimitaciones, la realidad social: la religión, las realidades políticas: ¿bajo que sistema viven o en qué trabajan?, el sistema de Gobierno, ¿cómo influye? …y las mil preguntas de nuevo…
Entendiendo, entonces que podía estar sin nunca acabar, más aún porque me atraía mucho el tema, comencé a preguntarme sobre ¿Qué queremos hacer?, Quiero registrar la memoria de la urbanización la Estación (Actualmente conocido como El Manteco), de su comunidad trabajadora. Me di cuenta que era muy amplio el tema para decirlo en 20 minutos, tiempo requerido para el festival comunitario donde participaríamos.
Empecé a pensar ¿Cómo lograr que sus integrantes se involucren e identifiquen y vivan la narración como experiencia cotidiana? (reflexión y amor por su entorno)…
Y empecé a delimitar mis objetivos: Registrar la memoria vivencial de la comunidad, contribuir con el rescate de la memoria colectiva, fortalecer los vínculos de la comunidad (Identidad cultural), tema que siempre me ha gustado y algo que esté dirigido a todo público, a aquel que conozca y no conozca a la comunidad y sobre todo que el punto de Vista fuera desde el grupo.
Entonces mientras tenía mis conversaciones telefónicas con Chui (productor, musicalización y sonido) y Ramón (cámara y fotografía) y chateaba con Alioth (cámara, fotografía y edición) y llevaba largas horas de trasnocho o desvelo, mientras leía sobre santería yoruba, y espiritismo y sus diferencias, el sincretismo religioso, y la palería, comenzaban a abrírseme otras puertas, el conocimiento ahora era más arraigado a entender nuestras raíces y respuestas de las personas que buscan tanta explicación a través de su Fe, quería hablar sobre mil cosas.
Era el momento de que la forma descansara y abrir paso al conocimiento, con las deidades africanas (orishas) y los santos del catolicismo, resultando el sincretismo religioso con la santería, la importancia de estos santos y quienes son y cuáles son sus contras para los humanos, si es que los hay, pude entender el significado de quienes son los Babalawos, espiritistas, santeros y comprender otras formas de creencias más modernas como el feng shui. Me di cuenta que estaba totalmente llena de información simbólica, donde el contenido iba más allá de la creencia.
Y así llegue a la reina del culto espiritista en Venezuela, María Lionza, Diosa grande representada montada en una danta, el simbolismo: el negro Felipe a su derecha (Corte Libertadora) y el indio Guicaipuro a su izquierda (Corte india), quienes forman las tres potencias. Entendiendo lo que ya había conocido en una forma presencial, las cortes venezolanas: India, Libertadora, Marcial, Médica, de los Juanes, Vikinga, africana, chamarrera y calé o malandra. Explicadas ahora y todas anotaditas en mi cuaderno de anotaciones, que llenaba cada vez más de apuntes.
Entonces busqué a mi consejera mayor, una de mis hermanas, quien se dedica a leer las cartas y hacer trabajos en la montaña de Sorte, lugar donde rinden culto a María Lionza, en el estado Yaracuy, pero a lo cual nunca he ido, es una de las exploraciones que para estos tiempos me falta por recorrer. Comencé a leer un libro sobre Santería que me prestó y me dio a entender que este tema hay que tratarlo con mucho respeto, de todos modos no queríamos herir susceptibilidades, lo cual conversaba con Chui, donde debíamos respetar las creencias sea cual sea… aunque a veces te preguntaras ¿así sea vista como un negocio?
Mientras continuaba mi investigación, comenzamos a hacer las cartas, para llevarlas a la comunidad e informarles que queríamos grabar en la zona, comencé a visitar los negocios que me recomendó mi amigo de la comunidad, y luego las que la misma comunidad iba recomendando, todo era de boca a boca, y así fuimos dándonos a conocer.
El punto de encuentro para el equipo era en las mesitas del Centro Comercial Capital Plaza (la pizzería), por la Avenida Vargas, ahí nos reuníamos e íbamos a ver la locación de recorrido para que los chicos de cámara y fotografía supieran cual era la zona, a pesar de ya conocerla, pero esto para estar seguros de lo que íbamos a hacer, siempre terminábamos las jornada de reunión con una sonrisa, porque la zona te llena de entusiasmo con su misticismo religioso.
El Manteco, zona principalmente de venta de productos esotéricos, ramas, vegetales chinos (mercado chino), consultas, y además con su Iglesia El Cristo, la cual es imponente en su arquitectura con respecto al espacio, era lo característico a simple vista pues entonces me fui a las oficinas del cronista de la ciudad, Ramón Querales, donde pude comprender de donde proviene su nombre “El Manteco”, pues resultó ser que es de un señor que se impregnaba su ropa de manteca, y era muy reconocido en el sector.
Mi segundo libro de consulta fue “El Manteco, Territorio de Oro” de Freddy Torrealba que cito: “El Manteco, quien durante más de 90 años constituyó el principal centro de labores comerciales al detal y mayor, en pleno corazón de la ciudad hasta su mudanza en octubre de 1983, a MERCABAR. Como núcleo urbano el sector existía desde aproximadamente 1876”. Entonces tenía algo más que decir y era el cambio de pasar a ser un mercado mayorista a un centro de comercio esotérico y parte como zona residencial, limitada por los fulanos 20 minutos para contar la historia, llegaba al punto de no hacerle mucho caso y seguir investigando.
Del libro un pasaje que me encanta cito: “Al final del siglo XIX llegaría al sector un vendedor de cochino frito de apellido Cuicas, procedente del Tocuyo. Este se instalaría en la casa ubicada en el lado sur de la calle 31 con carrera 22 (Las Tres Torres con Bruzual). Dicho matarife sería apodado “el Manteco”, pues la manteca impregnaba su vestimenta de franela y pantalón de kaki…Así nació la denominación “El Manteco”. Semánticamente su significado y función variaron según las circunstancias y necesidades de la realidad”…Fin de la cita.
El alumbramiento, la importancia de aquella época antes de finales del siglo XIX y principios del siglo XX era el ferrocarril, porque en la Estación el comercio y la tranza hacía la zona mucho más concurrida, ahora siglo XXI, sin ferrocarril y sin mercado mayorista El Manteco, éste sólo se reduce a ser una zona de ventas de hierbas, productos esotéricos, mercado chino durante el día y botiquines y prostíbulos por las noches. Sin embargo sigue siendo lugar de cruce de caminos. Me di cuenta que la zona era más rica de lo que imaginaba y mientras me delimitaba pensaba cuanto hay por decir…
La búsqueda del nombre, luego de pensar y pensar, pensaba que por ser comunitario lo más lógico es que el documental llevara el nombre de su parroquia y se llamara Concepción, de que vuelan vuelan, sin embargo la zona está entre dos parroquias tanto la Concepción como la Catedral, y así poco a poco se iría modificando mi conclusión del nombre hasta llegar por la importancia del lugar y su nombre coloquial fue ser: El Manteco, de que vuelan vuelan.
Lo de, "de que vuelan vuelan", es porque cuando preguntas ¿Te gusta la brujería?, por lo general las personas responden: “No, pero como dicen de que vuelan vuelan…”
Mientras nos íbamos poniendo al día, Chui preparó lo que nos faltaba como equipo en la producción y así organizamos la lista:
Lista de equipos:
(Producción)
Listo:
-2 Luces de 300 W
-1 Cámara mini dv
-1 Trípode fotográfico
-1 Balín
-1 Paral
-1 Micrófono Condensador Berhinger
-1 Audífonos AKG K-55
-1Cable XLR (audio)
-1 Cinta adhesiva
-1 Cámara Fotográfica
Debido a las cosas con las que contaba el equipo, y de las que no contaba, debimos solicitar ayuda de un co-productor, así nos unimos a CIECA, Centro Integral de Estudios de Comunicación Audiovisual, quienes al ver la idea y previamente conocernos, nos facilitó la cámara de video. Gracias a Luis Girón e Isabel Caroto, quienes nos apoyaron para la realización de este corto documental.
El proceso comenzó con la escaleta en la medida secuencial como un mini guión, y luego ya con la semana pautada en su proximidad, comenzar a darnos un poco a la aventura, teníamos los permisos de los comerciantes, todos dispuestos a colaborar, bien sea con la muestra de sus negocios o para contar un poco de lo que hacen en la zona, y así nos lanzamos al rodaje, ¡como se llama en cine!...claro, legalmente sería ¡nos lanzamos a grabar!.
GUION TECNICO ESTRUCTURA
Plan de Rodaje
Por Lucy González
Lucy: veo que ya la elaboración de un corto (lo digo por todo lo que leí arriba) es digno para otro documental, por eso siempre e pensado que decir que un trabajo final sea bueno o malo es una grosería, no todos somos capases de realizar, crear una historia elaborar un guión coordinar un personal creativo que nos brinde un trabajo uniforme y redondo, de verdad no es fácil, mucho éxito en el corto, espero verlo pronto..!
ResponderEliminarGracias peliculero, bueno fue un trabajo fuerte, y en producciones donde he estado sabemos que a pesar de lo sabroso que es, no se toma nada en juego, todo el proceso de llevar a cabo una producción es enserio, así sea de bajo presupuesto, con las herramientas que sea, tomando en consideración desde el tema hasta su hecho. Gracias, me alegro que te guste este blog. =)
ResponderEliminarTe cuento que este 29 de enero de 2011 se estará proyectando El Manteco, de que vuelan vuelan en el Cine Club Charles Chaplin a las 6:15 pm. Espero puedas asistir, un abrazo. L.